lunes, 11 de septiembre de 2017

Poda y plantación de rosales

De los restos de la poda puedes reproducir nuevas plantas con total garantía de éxito, ya que nos encontramos en el mejor momento del año para ello. Con esta poda le proporcionarás más energía, erradicarás enfermedades, y aumentarás y prolongarás su floración de otoño. En verano sólo debes dejar una tercera parte de ramas y hojas en la planta, cortando de forma que queden todas las ramas a la misma altura y vaciando el interior del rosal, eliminando todas aquellas ramas que toquen a otras. Si, por el contrario, está enfermo, sigue cortando hasta llegar al tallo sano córtalo por completo.

Cuando se corta un leño sano, aparece un color verde crema. Cualquier parte leñosa enferma, muerta congelada debe cortarse. Debes escoger una yema que crezca hacia fuera, para que el posterior crecimiento no se dirija aglomerándose en el centro de la planta; de este modo se fomentarían plagas y enfermedades en verano.


Cómo realizar la poda de un rosal


La poda en ángulo de 45º impide que se acumule el agua en la zona de corte, lo que acarrearía enfermedades sería motivo de congelación en invierno, dañando el leño. Cada corte debe hacerse a 6-10 mm. por encima de una yema latente, sesgado hacia el otro lado del tallo, de modo que el extremo superior del corte quede al nivel de la yema. Es importante que las podadoras estén muy bien afiladas para no pellizcar los tallos.

Se poda de forma drástica cortando todas las ramas entre diez y treinta cm. del tronco principal dependiendo del tipo de rosal. En invierno deberás cortar tus rosales para que presenten un despliegue continuo de flores. Y de dos terceras partes en verano (julio/agosto).

De todos modos, elija siempre las variedades menos vigorosas. La adaptación al cultivo en maceta depende de cada especie. Por otro lado, si usted aprecia particularmente los tipos de rosales más antiguos, pida consejo en el centro de jardinería.

Puedes consultar más información aquí para la poda del rosal


Cultivar rosales en maceta


No se aconseja cultivar rosales trepadores en maceta en un balcón, ya que las raíces necesitarán una superficie en la que extenderse a medida que los rosales vayan creciendo. Por ello es mejor preferir las plantas menos vigorosas. Si no hay humedad suficiente en el suelo en el interior del contenedor, la rosa no será capaz de ir buscarla en otros lugares.

Contrariamente al cultivo en el suelo, las plantas sólo podrán vivir de la humedad contenida en la bandeja. De manera general, el principal factor a considerar en este tipo de cultivo es la sequía. Sin embargo, es mejor no inclinarse por las rosas pequeñas utilizadas en ramos por los floristas, ya que muchas no prosperan cuando se las cultiva en macetas.

En general, los rosales modernos se adaptan más fácilmente a las bandejas. También se puede optar por otros cultivares enanos, que tienen la ventaja de ser resistentes. El tipo Meillandina, con su floración espesa que forma un espléndido ramo cultivado en macetas, es perfecto para el balcón.

Además, las flores de los rosales en miniatura sobresalen particularmente en superficies limitadas.

lunes, 4 de agosto de 2014

JARDINERÍA: EL ABEDUL Y SUS CUIDADOS

Bien, después de meses sin escribir (por ello os pido disculpas) os traigo un post sobre los abedules y sus cuidados. Como todos sabéis el abedul es un árbol de porte medio aunque algunos ejemplares alcanzan portes de más de 20 m. No obstante tienen un porte elegante, basado en troncos delgados y rectos que soportan ramas no demasiado gruesas.

Las hojas son de forma triangular o romboidal, con bordes aserrados y de color verde que en otoño adquieren una tonalidad amarillo-dorada tan característica.

Las flores del abedul son poco o nada vistosas, ya que se agrupan en conjunto de inflorescencias sin pétalos, llamados amentos, a menudo en forma colgante.

CUIDADOS DEL ABEDUL

Es frecuente encontrarlos formando alineaciones en los jardines públicos, pues soportan sin grandes dificultades la contaminación propia del ambiente urbano. Sin embargo, la propia estructura de las ramas supone un serio impedimento para el paso de los transeúntes, por lo que no resultan árboles muy apropiados para los pasos estrechos.

Dicha estructura de ramas debe ser respetada, ya que una poda severa atentaría contra la arquitectura del árbol.

CONSEJOS

Son árboles adecuados para jardines con un diseño de talante natural, donde la peculiar arquitectura del abedul sea aprovechada para recrear ambientes silvestres. Para disfrutar mejor del atractivo de su corteza es preferible plantarlo en grupos, delante de un fondo oscuro o en una pendiente.

Puesto que las raíces del abedul tiende a a crecer de manera extendida, es preferible plantarlos lejos de zonas pavimentadas o con edificaciones próximas.

lunes, 19 de mayo de 2014

Jardinería: Injerto de escudete en el rosal

Este tipo de injerto sobre los rosales se realiza durante los meses de julio-agosto. Para ello, se corta una rama del año sana y del diámetro medio del rosal que queremos reproducir. Suprimimos las hojas dejando los peciolos.


injerto-escudete-rosal



De la parte media de la rama se extrae la yema que se va a injertar. Se sostiene la rama con una mano y con la otra se marca con la navaja de injertar la parte que hay que levantar mediante un par de incisiones horizontales a cada lado de la yema (aproximadamente 1 cm por arriba y 1 cm por abajo. Se introduce bajo la corteza la hoja de la navaja, ligeramente inclinada, en el punto de la incisión superior y se desliza con un golpe seco hacia la incisión inferior.

Sí ha quedado alguna astilla adherida al escudete, la eliminaremos con la navaja, con cuidado de no dañar la yema. La astilla reduce las posibilidades de soldadura del injerto.

El escudete lo prepararemos justo en el momento de injertar.

En el portainjerto haremos un corte en T en un lugar liso y limpio de la corteza a unos 5 cm del suelo. Realizaremos una incisión transversal de 1 a 2 cm y luego se hace otra vertical (perpendicular a la anterior) de unos 3 cm de longitud.

Levantamos los bordes de la corteza con la navaja para poder despegarlos.

La unión

Se introduce con cuidado el escudete bajo la corteza del portainjerto sujetándola por el peciolo, que orientaremos hacia arriba. Empujaremos hacia abajo hasta que la yema se encuentre al menos un centímetro por debajo de la incisión transversal.


injerto-rosal-escudete

Si fuera necesario , recortaríamos la parte superior de la corteza a ras de la incisión transversal para facilitar un buen contacto entre el injerto y el porta injerto.

Por último, ataríamos con rafia sin apretar demasiado y sin tapar la yema. Diez días más tarde, se afloja la ligadura si el portainjerto es muy vigoroso.

Bueno hasta aquí un post más sobre injertos. Probarlo y espero vuestros comentarios.



domingo, 27 de abril de 2014

Jardinería: Injerto por encastre

El injerto es el medio más rápido para obtener una nueva planta con flor a partir de un fragmento de la variedad seleccionada.

Este tipo de injerto se debe realizar entre los meses de marzo y abril (aunque depende de las especies).

El injerto será una porción de rama (madera de un año) que incluya dos yemas.

El portainjerto deberá tener al menos un año. El diámetro del portainjerto o patrón debe ser sensiblemente superior al del injerto.

En la ramita seleccionada como injerto realizaremos en su base un corte a bisel triangular, dejando la yema inferior en medio entre el corte y el otro extremo de la rama. Este corte se realizará justo en el momento de injertar la planta.

A finales de marzo o principios de abril, cortaremos en patrón o portainjertos a unos centímetros del suelo. Limpiaremos con un trapo húmedo la herida realizada.

Con la navaja de injertar abriremos un hueco en forma de cuña, de tamaño y forma iguales a los del injerto que tenemos preparado.

Insertamos el injerto en el hueco en cuña practicado en el portainjerto, con las yemas mirando hacia arriba. tenemos que asegurarnos de que haya un buen contacto entre las cortezas: el injerto debe sostenerse solo.

Posteriormente, atamos con rafia el conjunto apretando ligeramente y aplicamos abundantemente masilla selladora, con cuidado de no tapar la yema que queda en la base.

El injerto habrá prendido cuando empiece a crecer y desarrolle sus primeras hojas. No hay por qué quitar la rafia, no existe riesgo de estrangulamiento pues el diámetro del portainjerto no variará.

injerto por encastre


viernes, 18 de abril de 2014

Jardinería: Cuidados de la Azalea

La azalea es una planta de flor de porte medio-bajo, arbustiva y leñosa, procedente de la China. Presenta un follaje compacto formado por hojas pequeñas y ovaladas que en algunos híbridos pueden ser pubescentes.

En el extremo de las ramas se desarrollan las flores, simples o dobles, con forma de embudo y colores muy variados. La floración tiene lugar durante el invierno.

En la actualidad existen numerosas variedades de azaleas que nos ofrecen múltiples posibilidades en cuanto a forma y color de la flor, porte de planta y momento de la floración.

Las azaleas agradecen lugares luminosos y aunque soporta el sol directo no es recomendable, principalmente en la época de floración.

Es muy importante mantener, en la floración, un nivel alto de humedad atmosférica, ya que en lugares secos los brotes florales se deshidratan.

Como planta de invierno tolera bien las bajas temperaturas. En el periodo de floración el riego debe ser abundante y habitual, de modo que el sustrato esté siempre húmedo. Es recomendable utilizar agua de lluvia para el riego y sobre todo huir de las aguas duras (calcáreas), pues perjudican el desarrollo de la planta y la viveza de los colores de las flores.

El sustrato debe ser ácido (turba negra o una mezcla de turba y mantillo). Se abonará el sustrato cada quince días en la época de floración.

No es muy sensible a plagas, aunque en verano pueden aparecer plagas como los pulgones (áfidos), araña roja y cochinillas.

cuidados-azalea
Azalea en floración





sábado, 15 de febrero de 2014

Jardinería: Césped y praderas

El césped es un elemento fundamental dentro de la jardinería al igual que lo pueden ser los árboles y los arbustos. Sirve para realizar multitud de actividades al aire libre, resultando una superficie acogedora.

En el plano estrictamente de la jardinería, los céspedes o praderas se articulan como auténticos espacios de transición , que sirven de contrapeso entre la vivienda y el resto de espacios verdes.

Por otro lado, es importante tener una superficie de césped bien proporcionada debido al alto consumo de agua en los meses de máximas necesidades. Tened en cuenta que un consumo medio es de 6 l/m2 y día de riego para los meses de máximas necesidades.

Si estáis pensando en realizar una pradera de céspitosas tenéis que saber que existen tres tipos de mezclas:

1. Ornamental. Este es el auténtico césped a la inglesa. Es una mezcla de textura fina y uniforme, pero a la vez muy exigente en cuidados (siega, abonado, riego, etc..). Este tipo de mezclas llevan una gran cantidad de Festuca arundinacea, siendo esta una cespitosa muy apreciada por su labor tapizante. Estas mezclan admiten otras variedades más finas como Lolium, Ray-grass y Poa pratense.

2. De Recreo. Son mezclas de cespitosas más rústicas, ideales para gente que no tiene mucho tiempo para el cuidado de la pradera. Son céspedes menos exigente en riego y cuidados, aguantando mejor el pisoteo. Ideales en casas con niños. Son céspedes de gran vigor con una proporción de 50% de Lolium perenne y el resto con Festuca, Poa y Agrostis.

3.- Uso intenso. Para zonas de juego de niños, áreas sociales y deportivas, parques públicos. Formado por gramíneas rústicas y sufridas, que aguantarán nuestra intensa actividad sobre ellas con un mínimo mantenimiento.

El tipo de mezcla es el siguiente. Variedades de Ray Grass más resistentes, Festuca, Agrostis y Phleum.

Espero que estos consejos os sirvan para aclararos a la hora de elegir aquel tipo de césped que más os convenga.

viernes, 31 de enero de 2014

Jardinería: Creación de un seto elevado

Los setos son elementos fundamentales en los jardines bien sea para ocultar una vista, elementos verticales (paredes) o enmarcar una vista e influir en la perspectiva del jardín.

Hay muchísimas especies vegetales que se pueden utilizar en la ejecución o realización de un seto elevado, pero para mí las dos especies que más me gustan son:

Cupressocyparis leylandii: Es una conífera de crecimiento rápido y es ideal para la formación de setos altos. Soporta bien las podas, y para la formación de setos se deben plantar a un marco de 0,8-1 m.

seto leylandii

















Otra de las especies que me encantan para la realización de un seto elevado es la Photinia frasseri red robin. Es espectacular el colorido de sus brotes con ese color rojo rubí. Igualmente, admite podas y aunque su crecimiento es menor que el del Leylandii su belleza es superior.

Recomiendo plantaciones con un marco de 0,75-1 m. Es una planta con mayores necesidades y cuidados que la anterior sobretodo en abonado. es recomendable en otoño realizar aportes de materia orgánica, sí queremos en primavera tener una brotación con un colorido espectacular.

Seto de Photinea Red Robin